El video a continuación habla a cerca de cómo los teléfonos son dispositivos que sirven primeramente a la voluntad de terceros.
Esto quiere decir que a la hora de tener uno has delegado tu privacidad e intimidad a las manos de los tenedores del monopolio de redes telefónicas, el gobierno y corporaciones facilitadoras.
¿Y tú qué métodos empleas para librarte del mal telefónico?
Los teléfonos han sido en su mayoría un problema, y no me gustarían ni aunque fuesen 100% libres, son un herramienta que permite acceso constante a internet, que da pie a obscenidades (¡Solo hay que preguntar porque los celulares en Japón deben tener el flash activado en los trenes!) y que encima pueden perjudicar al desarrollo mental del hombre. Entiendo y aprecio los llamados “dumbphones” pero los smartphones son terribles, y muchas veces es obligatorio tener uno para ciertos usos y sectores, es una plaga que se introdujo lentamente y ahora es un enredo poder salir de ella.
Vamos a tener que usar el clásico Flip-phone y los teléfonos públicos si es que queremos mantener nuestra privacidad lo mas cuidada posible… y ni eso es privacidad…
Desgraciadamente, como indicas, hoy en día es muy difícil intentar llevar una vida sin teléfono móvil. Es más, ahora mismo tengo 4 teléfonos (1 personal, 1 de mi empresa, 2 del cliente de mi empresa donde trabajo, siendo 1 para guardias y otro para el CPD, donde no hay cobertura “normal”). He hecho lo posible por centralizarlos y tener 3 de ellos en un sólo teléfono móvil, usando dual SIM y, el tercero, mediante desvíos de llamadas. Así sólo tengo que llevar un teléfono que agrupa todo, y un segundo dispositivo cuando esté trabajando en el búnker que es el CPD.
Por necesidad, tuve que buscar un buen dispositivo, tengo un Samsung Galaxy S23 (lo elegí principalmente por la estabilidad que ofrece la capa de personalización de Android de Samsung, la más pulida que hay hoy día desde la caída de HTC y su HTC Sense, considero) y por su tamaño tirando a mediano (hoy en día hacen teléfonos que parecen tablets). No estoy a disgusto con las características del teléfono, pero sí en el hecho de tener que depender del mismo; ya ni hablamos de la inseguridad e “imprivacidad” que implica.
He sopesado alguna vez la opción de adquirir un portátil (que ya el mío va pidiendo dejar de ser el equipo principal y pasar a ser parte del homelab: el retiro de mis ordenadores soldado jajajaja) con capacidad SIM, para poder tener funcionalidad de llamadas y SMS en el PC y poder prescindir del teléfono completamente, controlado desde GNU/Linux; pero no sé la viabilidad total de hacer eso, y con tantas SIM actualmente menos. Además, perdería la capacidad de recibir llamadas en cualquier momento; cosa que en el trabajo se me obliga cuando estoy de “guardia”.
En fin, es cuestión de dar pasos poco a poco hasta ir logrando un dominio de la tecnología total.
Estoy de acuerdo con todo lo dicho en los comentarios.
Bueno, no es nada nuevo o que no se halla tratado antes.
Con el tema de los SmartPhones es que, a mi parecer, fueron muy rápidos… La era de los PCs y después de las telecomunicaciones móviles les sirvió para ver la pasividad de la gente y como, ante la complejidad de estas nuevas tecnologías, podían aprovechar esta nueva brecha para un fin mucho mas grande y soñado por cualquier gobierno o entidad poderosa: el control y espionaje masivo. Como dice en el titulo del post, el sueño (húmedo) de Stalin.
Es por eso, y a mi parecer, que cuando le llego el turno al SmartPhon fueron muy rápidos, estandarizaron y agregaron capas y capas sobre sus sistemas para evitar que una competencia libre surgiese, como lo hizo en el PC y otros dispositivos anteriores.
En consecuencia ahora tanto el hardware como el software existente esta increíblemente limitado, sumado a la gran dependencia social a estos dispositivos, como ya se ha dicho en otras respuestas, hace que no podamos escapar ni buscar alternativas mas respetuosas.
Es por eso que digo que fueron muy listos y rápidos.